El Barcelona ha comenzado el 2015 de la peor manera posible, encajando una derrota en la jornada 17 de la Liga BBVA, en su visita a Anoeta, con un gol en propia puerta de Jordi Alba, dejando una imagen lamentable y lo peor, dejando pasar el tren del liderato que el Madrid había puesto en bandeja. Los de Moyes se califican como "matagigantes" al haber ganado en su estadio a Madrid, Atlético y FC Barcelona.
Dice el refranero español que a año nuevo, vida nueva, sensaciones nuevas, nuevos propósitos, nuevas enmiendas, todo ello estaría en la cabeza y en la mente de
Luis Enrique para este
2015, unas aspiraciones que ha tirado por la borda a las primeras de cambio. No voy a enfocar mi crónica en la actuación del técnico asturiano, pero no puedo dejar pasar por alto el
ESTREPITOSO papel llevado a cabo por él y su cuerpo técnico durante los 90 minutos del partido en
Anoeta y una hora antes, en el momento de decidir la alineación que sacaría para empezar el año ganando y aprovechando el pinchazo del
Real Madrid en su visita a
Mestalla.
Luis Enrique no acertó con el once a escena en Anoeta.
No sé que tiene en la mente el técnico culé, si se piensa que su trabajo es sorprendernos cada jornada, pues sí, enhorabuena, lo está consiguiendo, pero el problema es que lo que antes era paciencia, ya se está convirtiendo en desesperación. Y es cierto que el técnico los alinea y ellos juegan. los que corren son los futbolistas, pero ya llega un punto en el que el jugador, y más uno del
Barça que sabe cómo va la película, cuando lo mareas y lo cambias y le ordenas cada jornada algo distinto, acabas por
desquiciarle y volverle loco. Pero bueno, vamos a por el partido.
Podría llevarme hasta la entrada de nuevo año hablando y contando las locuras de
Lucho, unas locuras que, cuando
Leo Messi está bien, no se notan, pero cuando desaparecen las individualidades, tenemos un problema, y muy serio. Si a su llegada,
Lucho prometió que a sus futbolistas
"jamás se les achacaría un problema de actitud" y "voy a hacer lo mejor para que este Barça vuelva a ser lo que era", a día de hoy seguimos disfrazando las palabras y engañando a una afición que poco le queda por aguantar ya. Si comentas en la rueda de prensa anterior al choque que
Leo Messi, Neymar y Alves están bien para competir, ¿ por qué los dejas en el banco contra una Real Sociedad que te iba a poner en apuros ? Lo siento, no soy entrenador del
Barcelonaa para responder esa pregunta.
Dicho esto, la
Real Sociedad salió a por todas, contra un
Barcelona que no tenía en su once a
Piqué, Alves, Rakitic, Messi y Neymar, ( casi nada ) y que contemplaba como en el segundo saque de esquina del segundo minuto del partido más horroroso de la era
Luis Enrique; la
Real se adelantaba en el marcador con, no se lo pierdan, un gol de
Jordi Alba, cometiendo un error de
INFANTILES.
La
Real saca el córner en corto y el balón en vez de despejarlo hacia delante, Jordi lo aloja en sus propias redes. Bueno. era apenas el comienzo del choque y todavía quedaba muchos minutos para reaccionar. Y sí. el
Barcelona tenía la posesión, pero no llegaba, se acercaba, pero no ocasionaba peligro, la movía pero sin hacer daño, o lo que es lo mismo, tenía un
DOMINIO ESTÉRIL.
Iniesta no encontraba socios.
Luis Suárez no encontraba remata,
Munir defendía pero se perdía a la hora de atacar, y la Real pues cómoda con el planteamiento y sorprendida ante la formación que su rival puso a escena desde el inicio.
La Real se cargó también al Barça en su estadio.
Replegada atrás, buscaba las conexiones de
Canales y Granero con Carlitos Vela, para que el mejicano volviera locos a
Mathieu y Mascherano e intentase batir el arco de
Claudio Bravo. La película llegó a su descanso, el
Barcelona necesitaba una acción-reacción por parte de su técnico y ésta llegó en la entrada de
Leo Messi por Munir. Más tarde introdujo a
Neymar por Pedro, y la entrada de ambos futbolistas dio otro aire al equipo, que seguía sin generar fútbol pero por lo menos, tenía pólvora arriba para mojar en cualquier momento. Un momento que nunca llegó. La segunda parte transcurrió al igual que la primera, sin ideas, sin fútbol, desesperados por una
Real Sociedad que se ofrecía, se animaba a ir al ataque, se solidarizaba en conjunto y, todos unidos, es mucho más fácil.
Pasaron los minutos, y
Lucho metio a Dani Alves, en lugar de
Mathieu que tenía amarilla.
Los minutos pasaron y el Barcelona veía pasar por el estadio de
Anoeta el tren del liderato, un tren en el que en ningún momento del partido pareció tener intención de montarse.
En los minutos finales pudo empatar
Luis Suárez pero, y era lo que faltaba ya, apareció la figura portentosa del portero francés de la
Real Sociedad Jerónimo Rully, que salvó un mano a mano con el uruguayo y acto seguido sacó una mano prodigiosa para evitar el empate de los azulgrana.
No era la noche del
Barcelona, como tampoco lo fue en el
Coliseum, como tampoco lo fue el día del
Celta, como tampoco lo fue en
París. como tampoco lo fue en
Mestalla, pero
Busquets te salvó, En fin, realmente me da mucha pena hablar así de este equipo, porque creo, y firmemente en él, pero creo que la base del éxito es reconocer tus propios errores y sacarlos adelante para que no se vuelvan a repetir. Parece mentira que estemos hablando del
FC Barcelona, ese equipo de
Guardiola y Tito que si no ganaba por lo menos la piel se la dejaba, ahora no, ahora los jugadores ocultan a través de sus palabras la mala imagen del equipo y un entrenador que vive en
DisneyLand no sale del laboratorio, que es en lo que está convirtiendo el vestuario culé.
La imagen de Pedro resume la situación del Barcelona.
Todo ello en la misma jornada donde el
Real Madrid de los récords se la ha pegado en
Mestalla. tú vas y te la pegas en Anoeta. así difícil ganar títulos, y como dice
Xavi:
"No me entra en la cabeza otro año en blanco de títulos". Hay que tomar decisiones. la semana que viene es pronto pero yo pienso que es así y el
Barcelona de Luis Enrique, en la jornada 18 con la visita al
Camp Nou del vigente campeón, el Atlético de Madrid, se juega totalmente sus aspiraciones de cara a la competición. ¿ Locura lo que digo ?
El tiempo y los resultados me darán, o no, la razón.
Hecho por: M. David C. Martín ( @MDavidCorrea)