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La Vecchia Signora consiguió el pase a cuartos de final en un excepcional partido de Tévez y pone sobre el tapete lo que se intuía va a ser un hueso duro de roer para cualquier rival.
Comenzaba el partido con una contra comandada por Morata que conduce y ve el pase al argentino, en una de las muchas combinaciones que han hecho a lo largo del partido y que han destrozado a los alemanes, y éste dispara y despeja Weidenfeller. En la siguiente jugada iba a llegar el trallazo del "Apache", un disparo potente desde fuera del área y pegado al poste que hacía inútil la estirada del arquero. No se lo pensó el argentino, en cuanto tuvo la oportunidad disparó y acertó. Si el planteamiento inicial de los pupilos de Allegri era entregar la posesión y esperar para salir a la contra, el gol inicial no hizo más que reafirmar esa estrategia. Iba a utilizar el equipo visitante una de las estrategias más características los últimos años del equipo de la cuenca del Ruhr, salir con velocidad a la contra para liquidar los partidos sin tener mucho la posesión.
Tenía la pelota el equipo de Klopp pero era incapaz de crear peligro con ella debido a la lenta circulación y al buen posicionamiento de los italianos. Gundogan no iba a tener una de sus mejores noches y Mkhitaryan iba a estar en la línea pobre de toda la temporada. Surgía el primer imprevisto para los italianos e iba a llegar en forma de lesión de Paul Pogba, que llegó justo al choque de esta noche y tras recibir un golpe lo iba a sustituir Allegri por precaución. Metía a Barzagli y cambiaba el sistema, de un 4-4-2 pasaba a un 3-5-2 con el propio Barzagli, Bonucci y Chiellini de centrales, Evra y Lichsteiner de carrileros, Vidal y Marchisio en el doble pivote, Pereyra y Tévez de enganches y Morata arriba.
Conseguía el Dortmund meter unos minutos atrás a los transalpinos a base de balones largos y faltas laterales, pero eso iba a ser un espejismo ya que la falta de ideas iba a hacer su aparición de nuevo y dejaba a oscuras el ataque del Dortmund. En el descanso tenía que cambiar Klopp a Schmelzer por lesión y daba entrada a Kirch. La primera de la segunda mitad la iba a tener Morata tras una jugada de Tévez en la que el delantero argentino iba a dejar sentados a dos defensas y le entregaba al español en bandeja el 0-2, pero iba a disparar al muñeco el madrileño.
Los locales se veían sobrepasados en todos los aspectos, el medio campo no tenía ideas y no hacía circular el balón con fluidez y tampoco había presión tras pérdida, con lo que la Juventus movía cómodamente la pelota. La iba a tener de nuevo Morata y se la iba a parar nuevamente Weidenfeller, que optó esta vez por el disparo potente pero el alemán respondió bien. El primer disparo entre los tres palos del Dortmund iba a llegar por medio de Kampl tras un rechace iba a disparar desde la frontal y Buffon iba a detener sin muchos problemas.
Senticiaba el partido la Juventus por medio de Morata, tras un pase de Marchisio que hubiese firmado perfectamente Pirlo, dejaba sólo a Tévez para que corriera hacia portería e iba a dejarle al ex madridista la pelota a puerta vcía para que pusiera el 0-2 y senenciara el partido. No iba a tener reacción el equipo de Klopp, que ya sabía que el partido estaba terminado.
Iba a tener su doblete el ex del Manchester City tras soltar un latigazo que pilla a contrapié al portero alemán y certificaba su exhibición y el carácter del argentino, que no se esconde en las grandes citas.
Se dormía definitivamente el partido, con ambos equipos con ganas de que terminara el encuentro, unos para celebrar y otros para olvidar. Con este partido presentan los italianos su candidatura para dar guerra en cuartos, a pesar de haber apabullado al Dortmund sin Pogba y sin Pirlo.
Escrito por: @Jorge_MV_
