21 de mayo de 2015





La Juventus se impuso en la final de la Coppa de Italia por dos goles a uno a la Lazio en el partido disputado en el Stadio Olimpico de Roma. Los pupilos de Stefano Pioli no fueron capaces de conquistar el título jugando en su ciudad y cayeron en la prórroga ante una Juventus en racha.



El partido resultó más complicado para los bianconeri de lo que podía parecer en la previa, donde pocos daban un duro por los laziales. Tanto es así que se adelantaron en el marcador mediante un tanto de Radu en una jugada a balón parado. Primera jugada a balón parado y primer gol. Los juventinos no se iban a rendir y pocos minutos despues iba a empatar Chiellini tras una jugada a balón parado de nuevo, pero esta vez en una jugada poco habitual en el central italiano. Giorgio remató el balón en una semitijera y metió el balón en las redes.



Empezaba fuerte el choque, con un gol para cada equipo y la sensación de que podría ser un partido atractivo para los aficionados; pero fue un espejismo. En el resto del encuentro apenas hubo acercamientos a las áreas, y los pocos que hubo fueron a manos de los porteros o se marchaban despejados por las férreas defensas. Fue un partido táctico, atractivo para los amantes de esta faceta del juego, un encuentro en que la lucha sin balón marcaba el ritmo del partido.



No pudieron aparecer los grandes jugadores debido al modo del desarrollo del juego, apenas se vio a Pogba, al que se le nota falto de ritmo de juego tras su lesión, Pirlo tuvo destellos, pero estuvo bien tapado todo el partido, Felipe Anderson no tuvo campo para sus cabalgadas y posteriores disparos y a Klose apenas le llegaron balones en condiciones.



El encuentro lo iba a resolver un jugador que ni comenzó la temporada en su actual club y el cual ni siquiera tiene su pase en propiedad. Alessandro Matri, que está en el equipo turinés en calidad de cedido por el Milan, marcó el gol de la victoria para la Vecchia Signora. El atacante recogió un rebote de un mal control de Tévez tras un centro de Pirlo y golpeó de primeras con potencia.


La Juventus se proclama campeona de Coppa y de Serie A en esta campaña, demostrando así que hoy por hoy no tiene rival en Italia.

Escrito por: @Jorge_MV_
Llegaban el Arsenal y el Sunderland al Emirates en el partido que se aplazó por los compromisos coperos de los Gunners, y ambos solo necesitaban 1 punto para conseguir sus objetivos. Y aunque nadie consiguió ganar el partido, ambos se fueron muy contentos. El empate 0-0 asegura salvo catástrofe inimaginable el tercer puesto para el Arsenal. Los londinenses están 3 puntos por encima del Manchester United, pero tienen una diferencia de goles general de + 32 y el United la tiene de +25. Tendrían que lograr una goleada de escándalo en casa del Hull City los Red Devils y que el Arsenal perdiera su partido en Londres ante el West Brom. Una combinación de resultados inimaginable puesto que el Hull se lo juega todo ante el Manchester United, aunque peores cosas se han visto en el fútbol. Precisamente el Hull City ha sido la principal víctima de la poca efectividad goleadora de los de Wenger. El Sunderland logró la permanencia sumando 1 punto. La esperanza del Hull era que  el Sunderland perdiera en el Emirates y en Stamford Bridge y ellos ganaran al United, pero eso ya no va a ser posible. El Hull se aferra a la competitividad del West Ham en casa del Newcastle. Si los Hammers sacasen algo positivo de St James Park y el Hull lograse derrotar al United, los Tigres se salvarían.

Ambos equipo salieron al césped del Emirates Stadium con la pólvora mojada. El Arsenal se hizo con la posesión del balón des del principio del partido, y no la soltó en todo el partido. Fueron los Gunners los que intentaron adelantarse con más ganas, los que intentaron poner ritmo al partido. El Sunderland renunció al balón y se centró solamente en defender. El jugador más destacado del partido fue el guardameta rumano del Sunderland Costel Pantilimon. Detuvo todos los intentos de los jugadores Gunners con solvencia, y fue el héroe de su equipo, que jugará la temporada siguiente un año más entre los más grandes de Inglaterra. En la primera parte no huvo muchas jugadas destacables. Solo 2 remates altos de Özil y Wilshere y un remate cruzado de Giroud que se marchó por poco.

Nada más empezar la 2a parte, el colombiano Ospina tuvo que intervenir por primera vez, y fue una intervención de mucho mérito. Johnson dejó solo a Fletcher ante Ospina con un soberbio pase, y Ospina aguantó el mano a mano y tapó muy bien el disparo del escocés. Poco después un centro de Giroud tocó la parte superior del larguero antes de salir del campo. Giroud volvió a ser protagonista tras rematar con el exterior de su bota izquierda un centro del catalán Héctor Bellerín. El remate fue desde la frontal del área pequeña, y Pantilimon, con poco tiempo para reaccionar, demostró estar dotado de buenos reflejos. El Arsenal empezó a mover con rapidez el balón y a intimidar cada vez más al Sunderland. El número de ocaiones Gunners augmentaron mucho respecto al primer tiempo. Gibbs remató de cabeza dentro del área y Pantilimon atrapó bien. Fletcher se plantó solo ante Ospina en el minuto 60, con la defensa pisándole los talones, y quiso definir picando el balón. Ospina llegó a tocar lo justo para enviar el balón a córner. En el minuto 67, Van Aanholt mandó un potente balón dentro del área del Arsenal y Fletcher remató tirándose al suelo. El remate salió fuera por poco. El Sunderland tuvo buenas oportunidades de marcar en la segunda mitad. Pantilimon fue protagonista al blocar sendos remates de Walcott y Giroud.

Al final ambos equipos se repartieron los puntos y se fueron felizes, aunque el Arsenal volvió a decepcionar y no está realizando el mejor final de temporada. Con la final de la FA Cup a la vuelta de la esquina, las sensaciones no son del todo positivas en el equipo de Wenger. El Sunderland logró salvarse y encima en un campo tan importante como el Emirates. Noche perfecta para los aficionados del Sunderland.

Crónica redactada por: @JordiMadorell18

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